Desvelarse es parte de los hábitos de muchas personas. Ya sea por ver redes sociales, alguna película, trabajar o cualquier otra actividad, algunas mujeres y hombres no están hechas para dormirse temprano. Un grupo de expertos dice que esto tiene repercusiones negativas en nuestra salud. ¿Por qué es malo para tu salud estar despierto después de medianoche? La respuesta a continuación.
Una nueva investigación publicada en Frontiers in Network Physiology presenta una nueva hipótesis que sugiere que la mente es más susceptible a pensamientos negativos y a comportamientos destructivos después de la medianoche.
Según la neuróloga Elizabeth Klerman de la Universidad de Harvard: “hay millones de personas que están despiertas a medianoche, y hay evidencias de que su cerebro no funciona tan bien como lo hace durante el día”.
“La influencia del ritmo cardíaco en las actividades cerebrales cambia durante 24 horas afectando en la forma en que procesamos nuestras experiencias y respondemos al mundo que nos rodea”.
Lo que en el inicio nos ayudó como sistema de defensa, ahora puede contribuir a un sistema distorsionado de recompensa y motivación en el que interactuará de manera contraproducente sometiendo a las personas a un sistema de riesgo.
La noche fue hecha para dormir
Los expertos mencionan que los humanos fuimos hechos para dormir en la noche y despertarnos con la salida del sol. Lo contrario puede llevar a actos como el suicidio, el cual es tres veces mayor entre la medianoche y las seis de la mañana en comparación con cualquier otro momento.
Los seres humanos son más propensos al abuso de sustancias por la noche y tienen un riesgo casi cinco veces mayor de sufrir una sobredosis de opioides. Las personas también tienden a elegir alimentos menos saludables después de la medianoche y a correr más riesgos, lo que provoca lesiones y pérdidas económicas.
Se podría pensar que la privación del sueño es la causa de todas estas desafortunadas estadísticas, pero, como señaló recientemente el equipo de científicos que hizo el estudio, podría haber algo más en juego.
“Durante el día, los niveles moleculares [y] las actividades neuronales… se ajustan a nuestro comportamiento habitual… que incluye la actividad locomotora, la alimentación, [y] las interacciones conscientes con nuestro entorno”, explicaron.
“Durante la noche, estos parámetros están sintonizados con el comportamiento habitual del sueño. Así que, si estamos despiertos en esos momentos, la neurofisiología es propensa a fomentar la desregulación del comportamiento.”
Últimas consideraciones
Hay que aclarar que los mismos autores recomiendan realizar estudios sobre el funcionamiento y el comportamiento del cerebro por la noche (preferiblemente después de medianoche) con sujetos que no estén privados de sueño. Si la hipótesis de la mente después de la medianoche tiene algo de cierto, puede aplicarse en la práctica de inmediato.
“La solución más sencilla sería ayudar a los individuos vulnerables a dormir toda la noche, reduciendo así su exposición a las horas de mayor riesgo”, señalan los autores.