Todos hemos escuchado aquello de “dime con quien andas, y te diré quien eres”, y es que, efectivamente, tu elección de amigos habla sobre ti. Además, no solo da información sobre tu estilo, tus gustos o tus valores. Lo más importante es que habla de tu mundo emocional y de la relación que tienes contigo mismo. Al final, las personas que escoges en buena medida son el reflejo de lo que crees merecer.

Esto no significa que si una amistad te manipula o te falta al respeto sea tu culpa o que tú seas igual. Nada más lejos de la realidad. Sin embargo, permanecer junto a cierto tipo de personas o seguir alimentando ciertos vínculos nos da pistas acerca de nuestro nivel de autoestima y seguridad y sobre ciertos miedos y creencias que podemos venir arrastrando sin saberlo.

La importancia de la elección de amigos

Cuando somos niños y comenzamos la escolarización, la mayoría recibimos el mensaje de que “debemos ser amigos de todos”. Esta premisa, entendida como la necesidad de respetar y ser amables con quienes nos rodean puede ser útil; sin embargo, no es posible ni positivo tratar de agradar y crear vínculos profundos con todos cuantos nos rodean.

Ciertamente, las relaciones de amistades son muy beneficiosas. Nos ayudan a desarrollar un sentido de pertenencia, a cultivar valores como la lealtad, el apoyo mutuo y la intimidad emocional. Además, protegen nuestra salud física y emocional, y nos ayudan a afrontar las adversidades. Sin embargo, escoger a quienes van a nutrir ese círculo es fundamental.

Así, si quieres conocerte mejor y descubrir algunos aspectos de tu persona que quizá hayas pasado por alto, te invitamos a analizar tu círculo de amistades. Y, para ello, puedes utilizar las siguientes preguntas.

Amigos abrazados

¿La amistad es recíproca?

Esta es una de las cuestiones fundamentales que debemos plantearnos: ¿sientes que tus relaciones de amistad son equitativas y justas? Finalmente, estamos hablando de un intercambio, un vínculo en el que ambos participantes deben invertir para que resulte enriquecedor y positivo.

Si sueles sentir que tus amistades se aprovechan de ti, que das más de lo que recibes o que siempre estás disponible, pero nadie lo está para ti, quizá deberías parar y reflexionar.

En ocasiones tenemos expectativas poco realistas hacia los demás y hemos de comprender que cada persona tiene una vida y no todo gira en torno a nosotros. No obstante, es importante sentirnos valorados y priorizados por aquellos a quienes priorizamos.

Si te das en exceso a los demás, es posible que esta sea una estrategia que utilizas de forma inconsciente para asegurarte el amor de otros. De algún modo les dejas en deuda y esperas que hagan lo mismo por ti; pero esta no es una forma saludable de relacionarse. Cada uno ha de dar lo que realmente le nace y quedarse donde ese sentimiento sea mutuo.

¿Tus amigos respetan tus límites?

Al hilo de lo anterior, en muchas ocasiones tenemos amistades que no respetan nuestros límites. Nos llaman cuando saben que estamos ocupados, nos exigen presencia y favores incluso cuando no podemos o queremos darlos o siguen realizando actos y comentarios que ya hemos expresado que nos duelen.

En este caso, tu elección de amigos pone de relieve tu dificultad para establecer límites y hacerlos cumplir. Esto es común en personas con un gran deseo de agradar y un miedo al abandono; y es que, aunque logren exponer sus deseos y preferencias, permiten que los otros sigan pasando por encima.

Recuerda que el mayor compromiso contigo lo tienes tú y es tu tarea cuidarte y hacerte respetar. Poner límites también implica mantenerse firme a ellos y establecer unas consecuencias cuando alguien no los respete; aunque esto signifique terminar una relación.

¿Te tratan con amor y consideración?

Esta es una de las mejores formas de descubrir cómo se encuentra nuestro nivel de autoestima, fijándonos en cómo nos tratan quienes hemos escogido como amistades. Dado que se trata de vínculos afectivos, electivos y de beneficio mutuo, es esperable que estas personas nos traten con amor y consideración. Pero, ¿qué significa que no lo hagan?

Esto no indica que seamos mejores o peores personas, que seamos más o menos valiosos. El hecho de que alguien te dañe no implica que te lo merezcas, por supuesto que no; pero si tú lo permites y continúas en ese vínculo, sí es claro que eres tú quien no se ama.

Desarrollar una autoestima sana y sólida es complicado, especialmente si no recibimos la crianza más adecuada. Por tanto, no se trata de sentirnos culpables, pero sí de tomar conciencia de lo que está ocurriendo y de hacernos responsables.

Mereces ser tratado con amor y consideración; si estás aceptando menos, sería muy beneficioso buscar ayuda profesional para poder comenzar a trabajarlo en ti.

¿Cuál es la duración de la amistad?

¿Continúas con tus amigos de toda la vida? O, por el contrario, ¿eres de quién va cambiando de círculo social cada cierto tiempo? Este tipo de elección de amigos aporta varios datos interesantes. Por un lado, si continúas con tus amigos de la infancia, esto puede indicar que:

  • Si son amistades sanas y enriquecedoras, realizaste una buena elección desde el inicio.Posiblemente, tu personalidad y la crianza que recibiste te ayudaron a realizar a esta buena elección. Si son amistades dañinas y tóxicas, y aún las mantienes, esto señala que hay aspectos internos que debes trabajar.
  • Tienes buenos valores que propician la continuidad de la amistad. Por ejemplo, la lealtad, la honestidad y la asertividad. Eres tolerante, flexible y respetuoso, y saber ceder, negociar y buscar soluciones conjuntas ante las discrepancias.

Por el contrario, si tiendes a cambiar de amigos con frecuencia, esto puede indicar varias cosas:

  • Tienes dificultades para llegar a acuerdos o solucionar conflictos cuando estos se presentan. Tal vez seas demasiado exigente o te cueste comprometerte emocionalmente con otros.
  • También puede indicar que has realizado grandes cambios a nivel personal, que has crecido y madurado y esto te ha llevado a buscar personas acordes a tu nueva versión. Es posible que en algún momento del pasado descubrieras que tus amistades no eran las más positivas o adecuadas para ti y tuviste la valentía de dejarlas atrás.
Amigos hablando

¿Cuántos amigos tienes?

La cantidad de amigos que tienes también dice mucho de ti. Por un lado, si tu círculo es amplio y tienes facilidad para relacionarte con otros y crear vínculos, esto puede indicar que eres una persona extrovertida y abierta. Por el contrario, un círculo reducido nos habla de personalidades introvertidas, que prefieren conectar a un nivel profundo y crear conexiones significativas.

Sin embargo, hay otros parámetros que afectan, por ejemplo, el género y la edad. Algunos estudios han encontrado que el número de amistades decrece considerablemente a partir de los 25-30 años y que los hombres suelen tener más contactos que las mujeres.

Además, no podemos olvidar que sostener una amistad requiere realizar una inversión en tiempo y emociones. Y, dado que nuestros recursos cognitivos son limitados, no podemos ser íntimos de demasiadas personas. De hecho, los trabajos del antropólogo, psicólogo y biólogo Robin Dunbar sugieren que las amistades íntimas se limitan a entre 3 y 5 personas. A partir de aquí, contamos con otro tipo de grupos (buenos amigos, amigos, conocidos…) que son cada vez más grandes, pero con menos implicación emocional.

De este modo, para sostener amistades verdaderas, hemos de ceñirnos a unos límites que nos permitan atenderlas y cultivarlas. Y es especialmente en este reducido grupo donde la elección de amigos se hace especialmente importante.

En definitiva, somos la suma de las personas con quienes más tiempo pasamos y la calidad de estas relaciones puede darnos importantes pistas acerca de nuestra relación con nosotros mismos. Utiliza estos espejos para dirigir tu crecimiento personal.

Por galuvi

Información divertida, ligera y entretenida, sin dejar de lado los datos útiles y relevantes. Historias que nos inspiran para hacer del mundo y nuestro entorno un lugar mejor; hallazgos asombrosos, triunfos y éxitos compartidos.