Desde comodidad hasta ayudar a conciliar el sueño; estas son algunas de las razones por las que es bueno dormir con calcetines.
¿Eres de los que duerme sin calcetines? No te culpamos, quitarse esta prenda antes de acostarse es uno de los hábitos más comunes entre las personas. Sin embargo, puede que hacerlo no sea la mejor opción, al menos desde el punto de vista de la comodidad (o si sufres de insomnio). Aquí te contamos algunas razones por las que es bueno dormir con calcetines.
¿Por qué es bueno dormir con calcetines?
Aunque suene poco sexy, dormir con calcetines ofrece muchos beneficios para tus pies y tus rutinas de sueño.
De acuerdo con un estudio de la National Sleep Foundation, los calcetines de fibras naturales como algodón o lana actúan como termorreguladores, permitiendo que los pies se mantengan calientes incluso cuando el resto de nuestro cuerpo disminuye su temperatura. Esto provoca que los vasos sanguíneos se dilaten, provocando una relajación casi instantánea en el cerebro y apresurando la conciliación el sueño en el acto.
Además, evitan el molesto roce con las sábanas frías y ayuda a disminuir las ganas de ir al baño debido a los cambios de temperatura, mejorando por completo la experiencia al dormir. En el caso de las mujeres, se ha demostrado que usar calcetines durante el sueño puede contrarrestar los cambios hormonales causados por la menopausia y mejorar el flujo sanguíneo, permitiendo que este llegue más rápido a los puntos erógenos durante una relación sexual.
No todos pueden dormir con los pies tapados
Por supuesto, usar calcetines al dormir no es del todo benéfico, especialmente para quienes padecen enfermedades como diabetes, síndrome de Raynaud o problemas de circulación.
Los calcetines, así como las medias y mallas, comprimen la zona cubierta, disminuyendo la circulación de la sangre. Esto, a la larga, puede provocar varices o inflamación de los tobillos, además de que la sangre tardará más en llegar de los pies al corazón y viceversa.
Para evitar cualquier complicación, se recomienda que estas personas utilicen calcetines de materiales suaves, sin costuras, ni elásticos que aprieten u opriman los pies. También pueden eludir el uso de estas prendas, aunque eso no es del todo una orden, sino una recomendación.