En el mundo del emprendimiento, muchas personas tienen la idea de iniciar su propio negocio en línea como una forma de obtener ingresos y ser su propio jefe. La mención de esta idea a menudo genera entusiasmo y respuestas positivas entre amigos y conocidos. Sin embargo, dar los pasos para convertirse en un emprendedor real suele generar miedo y dudas.
Según Laura Ramírez Delgado, profesora de emprendimiento del Tec de Monterrey, este miedo a emprender se debe en gran parte a la cultura en la que vivimos, que nos enseña a ser perfeccionistas y no tolera los fracasos. Este temor es especialmente común en la generación millennial, nacida entre 1980 y 2003.
A pesar de ello, la experta asegura que es posible superar el miedo al fracaso. En el perfil del emprendedor, es importante tener en cuenta que no todo siempre saldrá bien, al igual que en la vida misma. Según Ramírez, es necesario trabajar en la resiliencia y eso se logra a través del desarrollo personal. Recomienda buscar espacios con profesionales, como terapeutas o expertos en coaching, para obtener apoyo y orientación.
Carlos Borberg, vocero de la compañía de soluciones para el comercio online BigCommerce, afirma que cualquier persona con una solución, como un producto que simplifique un proceso, puede incursionar en el campo del comercio. No es necesario ser un experto en creación de empresas o en aspectos técnicos específicos, ya que muchos aspectos se pueden tercerizar.
En el caso de BigCommerce, la compañía puede ayudar en diferentes aspectos, como la creación del nombre del negocio o la elección de la dirección de internet. Incluso pueden asesorar en la elección del producto a vender si no se tiene una idea clara.
Ambos expertos coinciden en que emprender conlleva riesgos, pero es necesario superar el miedo y trabajar en algo que apasione para tener un apego emocional a la actividad emprendedora. Para encontrar esa pasión, se requiere un profundo autoconocimiento y trabajar en algo que realmente motive. A pesar de los desafíos y momentos difíciles que puedan surgir, el compromiso y la determinación valen la pena para alcanzar el éxito.
Emprender no es solo para unos pocos privilegiados, sino que está al alcance de cualquier persona dispuesta a asumir el desafío y superar los obstáculos. Con resiliencia, pasión y trabajo duro, es posible convertir una idea en un negocio exitoso.